Comprar miel en internet directamente del apicultor
Comprar miel online es una práctica en continuo crecimiento, sobre todo desde el pasado confinamiento. Comprar miel directamente del apicultor es siempre la mejor opción. De este modo sabemos que se trata de miel natural, no adulterada y de calidad. Conocemos la proveniencia exacta del producto, además eliminamos intermediarios que solo encarecen el producto o, en el peor caso, lo modifican.
Encontrar miel de calidad, directamente del apicultor, puede ser difícil, sobre todo para aquellos que viven en grandes ciudades. Para este tipo de cliente, la mejor opción es encontrar un apicultor que también ofrece sus productos en una tienda online. Esto permite el acceso a mieles naturales con entrega a domicilio.
¿Comprar miel por internet es seguro?
Comprar miel por internet es igual de seguro que comprar cualquier otra cosa online. Aun así, hay que tener cuidado con algunos detalles para evitar estafas y productos de mala calidad.
Para que su compra sea segura le aconsejamos que compruebe algunos detalles como:
- que el apicultor tenga una tienda física – no es absolutamente necesario, pero es mucho más de confiar un apicultor que tiene un sitio físico donde da la cara por sus productos.
- que las opiniones de su tienda online o tienda física sean buenas, podemos ver las opiniones de los clientes anteriores y ver si se trata de un apicultor serio o no.
- que el proceso de compra sea transparente y se haga por los canales bancarios normales.
¿Cómo sé si le compro la miel a un apicultor?
El propietario de la tienda online de miel que comercializa debe poner toda la información necesaria para identificarlo en su página, además de las políticas de venta.
En las páginas de tipo «Sobre nosotros» encontrará la información necesaria para identificar el apicultor y/o su empresa. Cuando también cuenta con una tienda física, es sencillo identificar quien realiza el envasado de la miel y también podemos consultar las opiniones sobre la tienda física en su ficha de Google o en Google Maps.
Además, siempre puedes entrar también en las redes sociales asociadas al apicultor para conocer más sobre sus actividades relacionadas con la producción y venta de miel y la venta de miel online.
Información necesaria para la compra de miel online
Las mieles y otros productos derivados de la apicultura con venta online deben tener una serie de información básica imprescindible:
- Información del fabricante – el etiquetado debe identificar el prodcutor de la miel, por ejemplo en nuestro caso identificamos nuestros productos con «MEL EL REMEI»
- Cantidad neta – el cliente debe conocer la cantidad de producto que está comprando por ej. 250g, 500g, 950g, etc.
- Información de condiciones de conservación, si es el caso.
- Procedencia de la miel – por ejemplo, en nuestro caso todos los productos son de producción propia en el área de Alcover en la provincia Tarragona.
- Fecha de caducidad – la información no es necesario que se publique en la ficha de producto, pero si debe llegar impresa en el etiquetado del producto que recibe el cliente.
¿Si está bien comprar directo a un apicultor, debería comprar directo a particulares?
No se recomienda comprar directamente a particulares, además la legislación prevé que si un particular desea vender alimentos debe registrarse como operador alimentario y cumplir con las normativas y requisitos sanitarios.
Tiene que recordar que comprando a un particular no autorizado se expone a las posibilidades de comprar un producto adulterado, o un producto contaminado o de dudosa calidad. Además, nos exponemos a posibles fraudes, ya que el vendedor particular no dispondrá de plataformas de venta que ofrecen las mismas garantías de seguridad en la compra que ofrecen las tiendas de miel online.
Por ello desaconsejamos la compra de miel online de vendedores particulares.
¿Qué debo comprobar cuando recibo la miel?
Si compraste tu miel online, debes comprobar a recibir los envases que haya unos estándares mínimos:
- Que es el tipo de miel que pediste y en las cuantidades que pediste
- Que el embalaje de los productos individuales no está dañado.
- Que el embalaje está etiquetado y contenga la información del producto y fecha de caducidad o consumo preferente
- Comprobar que la fecha de caducidad es vigente.